Un saludo fraternal desde Puerto Rico para todos los colegas y lectores de esta columna. En esta edición hablaremos sobre uno de los grandes retos que enfrentaran los lideres/gerentes de este siglo: el cambio organizacional. por Héctor R. Torres
ABD, MBA, CPP, CFE
El cambio como fenómeno ha sido objeto de estudio del hombre por miles de años. Como ejemplo les puedo brindar los pensamientos sobre el cambio de dos famosos filósofos griegos. Tales de Mileto (624 AC – 547 AC) al referirse al cambio decía que el mundo estaba en un estado de fluidez; por su parte, Heráclito (544 AC – 484 AC) afirmaba que el fundamento de todo en el mundo estaba en el cambio incesante. Todo se transforma en un proceso de continuo nacimiento y destrucción al que nada escapa.
Siguiendo la línea de pensamiento de estos filósofos, el cambio se puede ver como una necesidad u oportunidad o como un reto si nos referimos a los cambios dentro de una organización o al cambio organizacional.
El lidiar efectivamente con el cambio organizacional se convertirá en uno de los retos más grandes para las organizaciones y sus gerencias en el siglo XXI. La importancia del cambio organizacional estriba en que permite a una organización a poder adaptarse a su medio ambiente de negocios.
Existen muchas causas por las cuales las organizaciones tienen que cambiar; algunas incluyen los avances tecnológicos, las tendencias económicas y los efectos de la globalización de los mercados, los cuales le requieren a las organizaciones tener mayor velocidad y agilidad en hacer sus negocios. Sin embargo, una organización tiene que cambiar para mantener su competitividad y evitar ser obsoleto en su medio ambiente de negocios.
Las organizaciones no cambian de un día para el otro ni cambian por cambiar, pues los cambios producen turbulencia dentro de las mismas. Si no se maneja adecuadamente el cambio organizacional puede causar más problemas que el bien.
En el contexto de los negocios, el cambio organizacional es el proceso de realinear una organización para cumplir con las demandas de su medio ambiente, mejorando los productos/servicios que ofrece y capitalizando en nuevas oportunidades de negocios. Para que el cambio organizacional sea exitoso en una organización, ésta debe ser basada en cuatro elementos esenciales; liderazgo, visión compartida, estrategias de cambio y la participación de todos los miembros en el proceso de cambio. Ahora examinemos cada uno de estos elementos.
• Liderazgo: habíamos definido el liderazgo como: el arte de influenciar a otros para llevar acabo la misión proveyendo propósito, dirección y motivación. Lo que enseña esta definición es que el líder debe liderar basado en un proceso de influencia y a la misma vez proveer propósito, dirección y motivación a sus seguidores. Estos mismos elementos son los que hacen la distinción entre lo que es ser líder y lo que es ser gerente. La importancia de liderazgo es que establece la base para el cambio organizacional a través de proceso de influencia. No se puede cambiar a una organización a menos que se cambie su forma de pensar y se establezca una visión compartida.
• Visión compartida: no se puede influenciar a grupo de personas para que trabajen hacia un fin común, a menos de que exista y se comparta una visión futurística de lo que el grupo puede lograr. En este sentido el liderazgo juega un rol importante en el desarrollo de una visión compartida. A través del tiempo se han desarrollado múltiples teorías sobre el liderazgo incluyendo la teoría del liderazgo transformacional. El liderazgo transformacional se basa en que los lideres deben proveer una visión futurística para poder transformar a una organización. La teoría se apoya en el principio de que no se puede cambiar nada en una organización hasta que se cambie la manera del pensar colectivo de la organización. Esto se logra cuando el líder provee una visión sobre el futuro de la organización.
• Estrategias de cambio: No se puede emprender una operación tan compleja como el cambio organizacional a menos que existan estrategias desarrolladas para implantar el mismo. Algunas de estas estrategias incluyen:
• Desarrollo de la Visión.
• Comunicación a todos los niveles de la organización durante todo el proceso.
• Gerencia participativa.
• Dirección durante todo el proceso.
• Evaluación continua de los procesos del cambio.
• Participación de todos los miembros de la organización: Por último, los cambios en una organización no se pueden realizar a tiempo y con calidad a menos que se tenga el compromiso de todos los miembros. La participación de todos los miembros, en todos los niveles, es crucial para un cambio organizacional exitoso, con menos resistencia y con menos turbulencia.
En nuestro próximo articulo, discutiremos sobre cómo implementar el cambio organizacional en la función gerencial de la seguridad corporativa. Les invito a sigan compartiendo sus ideas e inquietudes del mundo y la gerencia de seguridad.
* Si desea puede escribirle al autor al correo electrónico [email protected] .
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