Estados Unidos. Ubicado aproximadamente a 30 millas al suroeste de Los Ángeles, el Distrito Escolar Unificado de Torrance alberga a aproximadamente 24,000 estudiantes desde el jardín de infantes hasta la escuela secundaria. Torrance USD tiene 34 sitios escolares que abarcan escuelas primarias, secundarias y secundarias. Están unidos por tres escuelas diurnas preescolar, de continuación y de comunidad.
Los delitos violentos y otras ofensas son una realidad ineludible para las escuelas de los Estados Unidos y sus estudiantes. Durante el año escolar 2013-14, el 65 por ciento de las escuelas públicas [Fuente: Departamento de Educación de los EE. UU.] registró uno o más incidentes violentos, lo que representa un total estimado de 757,000 incidentes. Esta cifra se traduce en una tasa de aproximadamente 15 delitos por cada 1,000 estudiantes inscritos en 2013–14.
Si bien Torrance se encuentra entre las ciudades más seguras del condado de Los Ángeles, sus escuelas enfrentan los mismos desafíos que otras instituciones académicas. Al igual que con todos los sistemas escolares, TUSD tiene la obligación de mantener la seguridad y el bienestar de los estudiantes, así como del personal y los visitantes del campus. Junto con el asalto violento, otras preocupaciones clave incluyen el robo, los allanamientos, el vandalismo y el graffiti, junto con la necesidad de mantener un elemento disuasivo visible contra las actividades delictivas.
Hasta la fecha, el Distrito Escolar Unificado de Torrance había confiado en algunas instalaciones ad hoc en unas pocas escuelas que estaban mal planificadas y no tenían estándares consistentes establecidos. El mal posicionamiento de las cámaras y la calidad de imagen por debajo del estándar, especialmente en condiciones de poca luz, significaron que los perpetradores a menudo no fueron identificados con éxito. Esto limitó severamente la capacidad de las escuelas para resolver incidentes y servir como un elemento disuasivo eficaz contra otros incidentes.
Además de los ataques físicos y el robo, las escuelas en el distrito informaron rutinariamente casos de vandalismo a las propias cámaras. Como desafío adicional, el calor y el polvo del clima del sur de California impusieron demandas aún más vigorosas sobre el rendimiento confiable de las cámaras analógicas existentes en el Distrito Escolar Unificado de Torrance.
Para beneficiarse de la calidad de la imagen del reloj mejorada de manera significativa, así como de una mayor confiabilidad y menores costos de propiedad, el Distrito Escolar Unificado de Torrance eligió repensar su estrategia de cámaras de seguridad.
En total, el distrito ha instalado aproximadamente 1,100 cámaras de seguridad de video de Sony en 34 escuelas. Todas las cámaras han sido suministradas e instaladas por el integrador NIC, junto con una solución de administración de video en red provista por OpenEye. La mayoría de las cámaras son el modelo de minidomo robusto SNC-EM632RC y SNC-VB632D de Sony y las cámaras de bala, que ofrecen calidad de imagen Full HD en todas las condiciones climáticas y de iluminación.
El sensor de imagen Exmor CMOS altamente sensible y el potente motor de procesamiento IPELA Engine EX pueden enfrentar condiciones de retroiluminación severas, donde los extremos de luz y sombra en la misma escena a menudo plantean problemas para otras cámaras. Como beneficio adicional, la iluminación IR (infrarroja) incorporada brinda una imagen clara de personas e incidentes sospechosos en condiciones de oscuridad total
Las cámaras robustas y confiables se implementan ampliamente en todas las áreas al aire libre de cada campus escolar, incluidas las áreas sociales y deportivas, así como los estacionamientos. Desde la instalación inicial en 2015, las cámaras de Sony han funcionado perfectamente, sin que el personal de TI y de seguridad haya informado de problemas operativos.
La instalación de las cámaras ha tenido un efecto inmediato y medible en la seguridad de los estudiantes. Las suspensiones por violencia y agresiones se han reducido considerablemente, mientras que la incidencia de armas en el campus se ha reducido en más del 40%. Además, la presencia de las cámaras sirve para tranquilizar a los estudiantes y al personal, al tiempo que actúa como un poderoso elemento disuasivo contra la actividad criminal.
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