Latinoamérica. Las redes de telecomunicaciones móviles de 5ª generación - 5G - son una tecnología de conectividad inalámbrica de alta velocidad que es capaz de transportar un inmenso volumen de datos a través de conexiones más estables. Además, está revolucionando la comunicación en general, haciendo que nuestra vida evolucione de forma más cómoda ante las innumerables posibilidades que traerá.
Estamos siendo testigos de la transformación que el 5G está construyendo en múltiples esferas: desde la seguridad, la salud, el entretenimiento hasta la forma en que interactuamos y consumimos los medios.
Su ancho de banda más robusto admite grandes cantidades de datos. Esta velocidad y conectividad tan esperadas ha sido ampliamente publicitada como un cambio de juego, y no parece haber ninguna exageración. El 5G permitirá una conexión ininterrumpida de varios dispositivos simultáneamente, sin falta y con mayor estabilidad, dando soporte a las necesidades de la nueva era digital.
Según el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Innovaciones y Comunicaciones (MCTIC), 5G es más que una mejora con respecto a las generaciones anteriores. “Las redes móviles 5G proporcionarán servicios avanzados de banda ancha móvil, con mayores velocidades de datos, menor latencia y más capacidad, lo que permitirá un enorme potencial para nuevos servicios inalámbricos de valor agregado”. Con 5G, la transferencia de información se realizará en tiempo real, debido a la disminución radical de la latencia. Así, el uso de vehículos autónomos y cirugías remotas, por ejemplo, será aún más preciso.
En Japón, donde 5G ya es una realidad, la principal compañía de telefonía celular del país dio un hermoso ejemplo de cómo agregar otro ingrediente a esta conversación: creó EasyPass ™ - una solución de autenticación de empleados que permite el control de acceso mediante un smartphone. La solución es el resultado de una asociación entre RealNetworks y NTT Docomo. La tecnología utiliza 5G de Docomo y cuenta con el sistema de reconocimiento facial SAFR de RealNetworks, sin contacto, compatible con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) para la prevención y control de la pandemia Covid-19.
Además, 5G abre la puerta a una nueva categoría de tecnología: los wearables. Con los wearables, las posibilidades son infinitas, desde cámaras 5G para aplicaciones de ciudades inteligentes, como monitoreo de ruta y flujo, hasta el uso de una cámara de solapa por personas ciegas con un asistente de voz “in-ear”, reconociendo a las personas que los rodean. 5G acerca estas aplicaciones a la realidad.
Con 20 veces más ancho de banda que las redes 4G, 5G admite muchos más dispositivos en la red. Esto significa la capacidad de ejecutar, por ejemplo, softwares de reconocimiento facial con más cámaras y mayor conectividad. Un ancho de banda más eficiente también se traduce en una reducción significativa en el TCO (Total Cost of Ownership), lo que hace que muchas soluciones sean viables para una gama más amplia de clientes.
Teniendo esto en cuenta, RealNetworks lanzó SAFR Inside: reconocimiento facial de video en vivo que permite la detección y el reconocimiento facial en cámaras inteligentes como Axis Q1615 Mk III y P3255. SAFR Inside realiza un procesamiento directo en las cámaras y reduce sustancialmente la infraestructura en la punta. Además, elimina el hardware del servidor permitiendo el despliegue de una poderosa visión por computadora, a un costo de propiedad mucho menor, para una variedad de aplicaciones: monitoreo de lista de vigilancia, detección de máscara facial (alertas cuando no se detecta máscara), acceso seguro sin contacto con desbloqueo facial, análisis de multitudes (edad, sexo, expresión facial), conteo de ocupación, entre otros. SAFR Inside facilita el análisis complejo y, al mismo tiempo, proporciona conocimiento de la situación en tiempo real para la seguridad y análisis de video.
Con el 5G, soluciones como SAFR Inside sacan del papel innumerables teorías y las ponen en práctica: abren el camino para el desarrollo de ciudades cada vez más inteligentes, además de facilitar la implantación de nuevas aplicaciones, que permitirán la mejora de infraestructuras que van desde la movilidad urbana hasta la seguridad y salud pública. Las ciudades inteligentes utilizarán el poder de la tecnología y los datos para mejorar y gestionar la vida en la sociedad.
Las posibilidades son infinitas, desde la creación de puntos digitales altamente eficientes para los servicios KYC (Know Your Customer), tótems de autoservicio y robots que hablan con los clientes y brindan información enriquecedora. También permite la configuración de experiencias en varios dispositivos conectados, guiado de múltiples flujos como entradas a hospitales, escuelas y transporte, hasta pagos minoristas y usos listos para servir a la industria 4.0. De hecho, 5G abrirá puertas para acercar nuestra realidad a aplicaciones cada vez más rápidas y convenientes.
* Autor: Jose Larrucea, Vicepresidente Senior de Ventas Internacionales de RealNetworks.
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