Latinoamérica cada vez evidencia más interés en hacer inversión en seguridad, hay un sinnúmero de ítems en esta materia que son prioritarios para los países del área, toda vez que son reglones de primer orden para el desarrollo de la actividad económica en distintos sectores.
Para la región y muy específicamente en América del Sur se convierte en una necesidad urgente el conocer, analizar y proponer soluciones a los problemas de desarrollo que caracteriza a esta área en especial, por eso la trascendencia que toma el asumir nuevos retos y nuevas formas de hacer los negocios.
Un caso específico de este panorama son Venezuela y Argentina, en especial por sus problemáticas políticas y económicas, que pueden considerarse como barreras, empero, al mismo tiempo, son artífices de nuevos retos para el segmento de seguridad electrónica y las empresas que atienden estos países.
Otras naciones de la región como es el caso de algunas situadas en Centroamérica, con algunas dificultades económicas, pero con inmenso potencial de desarrollo, son también retos para la industria, y muchas compañías ya están poniendo la “carne en el asador” con fuertes inversiones en personal, infraestructura y agresivas estrategias que buscan conquistar esta área un poco subvalorada.
En este orden de ideas se puede enfatizar en buscar estrategias en pro de contrarrestar algunos de los factores determinantes que contribuyen a agudizar y obstaculizar las vías de desarrollo en los sistemas económicos, políticos, sociales, culturales, entre otros y los cuales a su vez inciden sobre el comportamiento y los patrones de desarrollo en dichos países.
No obstante en la capacidad de adaptación, conocimiento y nuevas formulas está la real tarea de salir avante y conquistar nuevos mercados que a su vez le entreguen dinámica a un sector que aunque viene teniendo un buen desarrollo no le sobra sumar nuevas alternativas.
Queremos conocer su opinión, envíenos sus comentarios a [email protected]
Deje su comentario